Euronews ha sabido que la Comisión Europea no cumplirá el plazo para adoptar un crónica sobre la migración interiormente de la UE correspondiente al año previo, que servirá de pulvínulo para las decisiones sobre la cuestión a nivel interiormente de la UE.
“La Comisión Europea se tomará más tiempo para perfeccionar el crónica en las próximas semanas y se dilación que sea prohijado en breve”, dijo a Euronews una fuente, explicando que las consultas con los estados miembros aún estaban en curso.
Según las nuevas regulaciones, el Ejecutante de la UE tiene hasta el miércoles para adoptar un crónica sobre migración y presentarlo al Parlamento Europeo y al Consejo.
El Documentación Europeo anual sobre Orfelinato y Migración debería incluir una evaluación de la situación migratoria universal en los países de la UE, incluido el número de solicitudes de inclusa, el número de personas a las que se ha concedido protección internacional, las entradas irregulares y la capacidad de recibo.
El esquema de ley designaría a algunos estados miembros de la UE como “bajo presión migratoria”, “en peligro de presión migratoria” o “enfrentando importantes problemas migratorios”. La designación allana el camino para el llamado mecanismo de solidaridad, según el cual los solicitantes de inclusa serían reubicados en otros estados miembros.
Paralelamente al crónica, la Comisión Europea planea establecer un fondo de solidaridad anual para determinar el número total de solicitantes de inclusa que serán reubicados y la cantidad que cada Estado miembro debería asignar.
Juntos, este crónica y el Fondo de Solidaridad constituirán la pulvínulo para desarrollar el sistema de “solidaridad obligatoria” previsto en el Pacto sobre Migración y Orfelinato, una importante reforma de la política migratoria adoptada en 2024.
Esta “solidaridad obligatoria” debería proporcionarse a cada estado miembro en proporción a su población y su PIB total. Esto significa que los países más destacados y ricos de la UE deberán hacer más para mandar el sistema de inclusa de la UE.
Según el plan, los gobiernos de los estados miembros de la UE pueden designar entre tres opciones para satisfacer las deyección descritas en el fondo de solidaridad: reubicar a un cierto número de solicitantes de inclusa en su distrito, remunerar 20.000 euros por cada persona que no será reasentada o financiar apoyo activo para los estados miembros bajo presión migratoria.
Según la legislatura, cada fondo solidario debería incluir al menos 30.000 transferencias y una ayuda financiera de 600 millones de euros.
Una vez propuesta por la Comisión Europea, la propuesta anual de solidaridad debe ser aprobada por los estados miembros de la UE, que sólo pueden repeler la propuesta por mayoría cualificada. Eso significa que al menos 15 de los 27 países que representan al menos el 65% de la población total de la UE tendrían que aseverar que no.
La legisladora alemana Birgit Sippel, una de las eurodiputadas secreto que negocia el acuerdo migratorio, criticó a la Comisión Europea por no cumplir el plazo y anunció en las redes sociales que convocaría una reunión de emergencia de la Comisión de Libertades Civiles, Honradez y Asuntos de Interior del Parlamento Europeo.
Alemania ha perdido su primer puesto entre los países de la UE con más solicitudes de inclusa en el primer semestre de 2025, según la revisión de porción de año de la Agencia de Orfelinato de la Unión Europea. Francia (78.000) y España (77.000) aceptan más solicitudes que Alemania y se han convertido en destinos importantes para los solicitantes de inclusa en los últimos abriles.
España fue el Estado miembro de la UE que concedió el maduro número de solicitantes de inclusa en el segundo trimestre de 2025 (16.060, el 24,4% del total de la UE), por delante de Francia (14.220, el 21,6%), Alemania (13.450, el 20,5%) e Italia (7.360, el 11,2%).